El ministro de Desarrollo Social, Federico Masso, recibió esta mañana al director del Dispositivo de Cuidado Institucional (DCI) Santa Micaela, Pablo Ivires, junto a la reverenda madre Marta Elena Trejo y a la hermana María del Valle Velardez, para rubricar el convenio marco que define acciones de trabajo mancomunado entre el gobierno Provincial y la congregación religiosa Hermanas Adoratrices.
El objetivo del acuerdo es diagramar un plan de acción que ordene las necesidades más urgentes a resolver, y a la vez aunar metodologías de trabajo conjunto en pos del bienestar de las mamás adolescentes que actualmente se alojan en el DCI. También participó del encuentro la secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia de la cartera Social, Graciela Sare.
Al respecto, Masso expresó: “Ha sido un honor recibir a las hermanas que conducen este hogar con gran vocación de servicio y enorme solidaridad. Renovar este contrato es muy importante para nosotros, porque cada vez que los visitamos nos emociona ver el trato que reciben las niñas y las herramientas que suman para afrontar la situación que les toca vivir y para su futuro”.
Además, el ministro compartió la emoción por despedir a las hermanas que actualmente coordinan el lugar, ya que recientemente fueron designadas a otra tarea religiosa, que sin lugar a dudas desempeñarán con el mismo compromiso que lo hicieron en el DCI.
Por su parte, Sare manifestó: “La comunidad religiosa tiene años de trabajo y son los propietarios de este espacio, que junto al Estado provincial desarrollan articuladamente la tarea de cuidado de adolescentes que han vivido situaciones de vulnerabilidad social, y se encuentran embarazadas o con hijos a cargo”.
La funcionaria destacó el trabajo que se lleva adelante en el DCI, acompañando a las adolescentes en su rol de madre y capacitándolas para que una vez que egresen puedan lograr una autonomía progresiva.
A su turno, Ivires conpartió: “Desde el año 1985 que el Santa Micaela trabaja de esta manera, en dónde las hermanas hacen una tarea de acompañamiento espiritual y la Provincia asume aportes económicos importantes, y provee el personal y los profesionales para el cuidado de las niñas”.
Finalmente, Trejo resaltó: “Somos una congregación grande con impacto en varios países de Sudamérica, y puntualmente en Tucumán hemos logrado un gran trabajo junto al Gobierno, pensando en el cuidado de mamás adolescentes. Contamos con un equipo técnico laico muy comprometido y nos sentimos muy cómodas de poder trabajar conjuntamente al Estado”.
El DCI Santa Micaela es un dispositivo estatal que trabaja en la promoción y restitución de derechos de mujeres adolescentes sin cuidados parentales, continuando los lineamientos de acompañamiento y cuidado establecidos por el gobierno Provincial que encabeza Osvaldo Jaldo.