Mediante un trabajo articulado entre diferentes organismos del Ministerio de Desarrollo Social que encabeza Gabriel Yedlin y municipios y Comunas Rurales, este martes se entregaron herramientas a mujeres víctimas de violencia de género, incluidas en el programa Emprendiendo Aprendo y a mujeres autónomas, en situación de vulnerabilidad social.
El acto se realizó en el Ingenio Cultural y estuvo encabezado por la asesora de Género de la cartera Social, María del Carmen Carrillo; el subsecretario de Economía Social y Solidaria, Miguel Cerviño; la titular del Observatorio, Verónica Ale; y la directora de Promoción de la Secretaría de Mujeres, Florencia Villagra.
Se dieron 15 herramientas a mujeres de Capital, Monteros, Burruyacu, León Rougues y Villa Quinteros que se desempeñan en diferentes rubros, totalizando 100 en lo que va del año.
Tras la entrega, Carillo indicó: “Es una entrega importante. Sabemos, sin lugar a dudas, que la mejor manera de acompañar a la mujer es mediante herramientas para favorecer su independencia económica. Estos son los nuevos paradigmas del abordaje de la violencia de género”.
En ese sentido, agregó que “detrás de cada una de estas mujeres hay una historia de vida y desde el Ministerio estamos tratando que esa historia mejore, que se superen y puedan salir a flote”.
Luego, Ale señaló que “estamos muy contentas porque pudimos hacer otra entrega a consultantes del Observatorio que venían en proceso de atención y abordaje integral que se ofrece desde el servicio”.
Además, explicó que “una de las líneas más importantes es la de fortalecimiento de procesos productivos y en eso se encuadra el programa Emprendiendo Aprendo, que busca generar autonomía económica para que aquellas mujeres que transitan situaciones de violencia puedan salir de tales situaciones”.
A su turno, Villagra comentó: “Nos pone muy contentas porque es un trabajo que se viene haciendo de manera articulada. El trabajo a nivel territorial en prevención y promoción de derechos es muy importante y el acceso a un trabajo y a capacitación también es asegurar derechos”.
Emprendedoras
Verónica consultante del Observatorio que se desempeña como costurera y modista y recibió una máquina de coser, afirmó: “Me hacía mucha falta porque quería empezar mi proyecto con bordados para grupos de egresados. Trabajo desde mi domicilio y con esto voy a mejorar mi trabajo y pensar en otros proyectos”.
Asimismo, destacó que “hay muchas mujeres que dicen ‘yo no puedo´ y gracias a esta ayuda nos damos cuenta de que sí podemos salir adelante, dejar la violencia y empezar a entender que no somos esclavas”.
Finalmente, Valentina, otra de las emprendedoras, contó que “tengo un emprendimiento de peluquería, trabajo a domicilio y estoy terminado la carrera de Peluquería”.
Respecto de su situación y del valor de las herramientas recibidas, manifestó que “tuve problemas con mi pareja, tengo una nena que mantener sola y gracias al acompañamiento estoy haciendo posible todo esto”.
