Lorena Málaga, nueva ministra de Desarrollo Social puesta en función hoy por el gobernador Osvaldo Jaldo, cuenta con una profunda formación humanista. Egresada de la Escuela Sarmiento, abordó la carrera de Medicina en la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), donde se recibió de médica generalista, y fue además jefa de residentes de Medicina General.
Cuenta con especializaciones en Salud Pública y en Administración Pública; y fue reconocida como Joven Profesional destacada en 2006 por el Instituto Provincial de la Administración Pública (IPAP).
Como funcionaria, trabajó como directora de Salud y Acción Social de la Municipalidad de Monteros, donde se desempeñó también como directora del Hospital.
En 2015, y ya en la órbita del Ministerio de Desarrollo Social, asumió como subsecretaria de Atención a Familias en Riesgo Social; y en 2019 se hizo cargo de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia.
Durante todo su recorrido, supo construir paradigmas del trabajo territorial con los gobiernos locales, siempre teniendo como norte el trabajo articulado, para atender las necesidades de los grupos más vulnerables.
En su oportunidad, el ex ministro Gabriel Yedlin había remarcado que “Lorena siempre se desempeñó de manera brillante, muy técnica, muy seria, y con una enorme vocación de trabajo para ayudar a la gente. Además, tiene una relación maravillosa con todos los delegados comunales, los ministros e intendentes, lo que es fundamental para acercar respuestas inmediatas”.
Hoy, la ministra Málaga asume un nuevo desafío al frente de la cartera social, y está más que capacitada para poder continuar cuidando a las personas que más lo necesitan.