Un grupo de 30 mujeres titulares del programa Potenciar Trabajo comenzó esta mañana su práctica profesional en el centro educativo terapéutico Acompañar, destinado al cuidado de personas con discapacidad.
Las mismas fueron capacitadas por la Universidad Nacional de La Matanza (que avala la certificación) y el Ministerio de Desarrollo Social provincia.
En el marco de la transformación de programas sociales en empleo genuino, dos de esas mujeres fueron contratadas como cuidadoras en la institución, accediendo así a un trabajo formal.
Durante el lanzamiento de la etapa de prácticas, estuvieron presentes el ministro de Desarrollo Social, Gabriel Yedlin; el secretario de Unidad Ejecutora de Programas y Proyectos Sociales, Guillermo Socolsky; la directora de Acompañar, Graciela León; el director de Discapacidad, Hugo Jovanovics; y la subdirectora de Programas y Proyectos Sociales, Ana Durgam.
Al respecto, Yedlin agradeció a Graciela León y expresó: “Estamos transitando este camino de llevar los programas sociales a trabajo con el convencimiento de que el cuidado es un trabajo y hay muchas oportunidades en ese sentido”.
Asimismo, explicó que “junto a la Universidad de La Matanza, que certifica la capacitación, estamos capacitando a más de 200 titulares de Potenciar Trabajo que están en la etapa de prácticas profesionales en instituciones de discapacidad”.
En ese sentido, destacó que “en este vínculo tomaron dos personas como trabajadoras formales, con derechos, que es lo que uno busca porque no tenemos mejor ordenador social que el trabajo. Queremos que todos los programas vayan hacia el trabajo, los titulares también quieren eso y venimos avanzando en ese sentido como lo hicimos con los trabajadores de la cosecha y la Uocra”.
Luego, Socolsky precisó: “Estamos formando en la provincia a más de 200 titulares de Potenciar Trabajo como cuidadoras de personas con discapacidad. Cuando terminen el curso, algunas tendrán el certificado avalado por Universidad Nacional de La Matanza y otras por la provincia, pero todas concluirán la formación que tiene un doble objetivo; por un lado, incorporar herramientas para cuidar a sus familiares con discapacidad (las que los tengan); y por otro, es una posible fuente de inserción laboral porque se necesitan cuidadoras de personas con discapacidad, al igual que de primera infancia y adultos mayores”.
En ese marco, indicó que son 11 los centros de cuidado como acompañar que abrieron sus puertas para que las titulares puedan hacer sus prácticas.
Por su parte, León manifestó: “Siempre recibimos pasantías y prácticas porque creemos que enriquecen a la institución. Nos pareció muy bueno el proyecto que tienen desde Desarrollo Social para recibir a las titulares que acaban de terminar el cursado con la Universidad de La Matanza sobre asistencia a personas con discapacidad. Nos va a venir muy bien porque es una ayuda a nuestra institución y ellas harán una práctica con nuestros pacientes”.
Sobre el trabajo de la institución, comentó: “Acá concurren niños desde los 6 años, tienen un proyecto educativo con una maestra y abordaje terapéutico. Desayunan a la mañana, inician la actividad, tienen una colación a media la mañana, retoman el taller, al mediodía desayunan y luego se van a sus casas”.
Testimonios de titulares
Debora Loló, sostuvo: “Fueron muy lindas las capacitaciones., ayudaron mucho a nosotras que a veces no tenemos tiempo, pero por suerte nos dieron horarios para poder estudiar y poder tener el día de mañana un trabajo fijo o para la familia también. Me gusta en donde ingresé porque me gusta tratar a niños, adolescentes y adultos porque a pesar de las diferencias a mí me llena el alma porque tengo familia con discapacidad y me gustaría siempre trabajar en el entorno de la discapacidad”.
Posteriormente, Myriam Villoldo, contratada por Acompañar, resaltó: “Agradecida con el programa y la directora de la institución. Uno viene capacitándose hace mucho y hoy en día puedo decir tengo un trabajo’. No es como dicen ‘es un plan y lo hacen de arriba’. Esto cuesta, hay que estar, formarse y está muy bueno, porque el saber no ocupa lugar. Hoy puedo decir que estoy por empezar un trabajo que me gusta”.
Para concluir, Giselle Gómez dijo: “Es un programa muy lindo para poder aprender. Tengo una nena con discapacidad y me interesa para el futuro de ella, pero además la esperanza de conseguir un trabajo y seguir progresando”.
