Empleados del Instituto Gerontológico San Alberto se realizaron esta mañana testeos rápidos de Coronavirus a fin de prevenir contagios a los residentes de la Institución, que depende del Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Gabriel Yedlin.
Al respecto, la secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia, Lorena Málaga, indicó que “en el contexto dela pandemia se realizó un testeo rápido a los trabajadores del Instituto San Alberto para determinar el cuadro de cada trabajador”.
Explicó que “la finalidad del operativo apunta a prevenir los contagios para las personas mayores que cuidamos y tenemos alojados”.
Por su parte, la directora de Adultos Mayores, Nilda Roldán, contó que en el Hogar “hay 52 residentes, varones y mujeres, algunos más dependientes que otros y unos 150 empleados de los cuales 110 trabajan porque el resto está licenciado por tener factores de riesgo”.
Asimismo, aclaró que “San Alberto no es un servicio de Salud, sino un hogar, pero es necesario proteger a los empleados porque pueden traer el virus y contagiar a los residentes”.
Roldán aseguró que se les proveyó de elementos de protección personal y se pusieron en práctica todos los protocolos, tanto internacionales como de los Ministerios nacional y provincial en lo que hace a restricción de las visitas.
En ese sentido, afirmó que “desde marzo no entran las visitas y la comunicación con los familiares a través de videollamadas, teléfono o fotografías”.
Finalmente, contó que “instalamos una sala de aislamiento, con todos los elementos de protección para el caso de que hubiere un residente con síntomas sospechosos hasta que el Ministerio de Salud realice su protocolo”.